Por: José Renán Trujillo
Amigas y amigos vallecaucanos
En el Valle del Cauca hay incertidumbre y un sabor algo amargo sobre la posibilidad de que el arancel para la importación de azúcar siga bajando.
Sabemos que más o menos 270 mil hectáreas de las tierras vallecaucanas se encuentran sembradas de caña de azúcar.
Su producción se destina al abastecimiento de tres ingenios,
dueños de la cuarta parte del cultivo. Y el resto de la tierra corresponde a más de 1.700 cultivadores que entregan en arrendamiento sus propiedades.
Foto: Corteros de Caña de www.eltiempo.com |
Lo más importante de anotar es que cerca del 30% de la población vallecaucana depende de la actividad azucarera.
Fedesarrollo hace unos cuatro años presentó un estudio que señala que por cada empleo generado por los ingenios azucareros en sus plantas de producción, se generan 28.4 empleos adicionales en otros sectores de la economía.
Y por la actividad manufacturera de los ingenios se obtienen 265 mil empleos en toda la cadena de valor.
Para los primeros cuatro meses del año, la producción total nacional de azúcar fue de 680.962 toneladas y el consumo nacional fue de 552.524 toneladas, lo que lleva a una exportación de 166.380. Pero escuchen ustedes este dato adicional: la importación fue de 39.411. Por eso, las alarmas están prendidas en el Valle.
El año pasado el Ministerio de Comercio, Industria y Turismo
emitió un decreto que redujo el arancel hasta el 70% y ahora se habla de que este podría ser menor al 45%.
La asociación de empresarios de Colombia, Andi Valle del
Cauca, solicitó al gobierno mantener el arancel actual, pero todo pareciera indicar que tuviese oídos sordos.
Cauca, solicitó al gobierno mantener el arancel actual, pero todo pareciera indicar que tuviese oídos sordos.
Todo esto lleva a preguntarme y a dejarle a ustedes la inquietud:
¿Qué está pasando con el sector azucarero en el país?
https://twitter.com/Todelar/status/752512062081929216
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