Por:José Renán Trujillo
¡Qué dicha despertar en un país en donde el cese al fuego es una palpable realidad y donde los fusiles se
silenciarán para siempre!
Poco a poco va avanzando el exigente proceso de pedagogía para que
el pueblo colombiano conozca, analice y comprenda cada palabra, cada frase
del contenido del acuerdo final logrado en los diálogos de La Habana.
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| Foto: www.gerente.com |
Los medios de comunicación escritos de país, trajeron en sus
ediciones dominicales, una gaceta con el texto oficial. Así nadie podrá decir que no se enteró, que no
supo o que no le informaron. ¡Buen inicio del maratónico proceso que se deberá cumplir de aquí
hasta la votación del plebiscito!
Hay quienes no sé si por halagar, en mi sentir indebidamente, al
mandatario; consideran que el Presidente Santos ya puede decir con plena
satisfacción; misión cumplida, al considerar que respondió al mandato
que recibió en las urnas de lograr la paz. Pero difiero de tal apreciación porque creo que apenas empieza su labor para
cumplir a cabalidad los acuerdos y lograr no solo su refrendación sino, su
implementación. Tal vez no logrará la totalidad de lo segundo en lo que
le resta de mandato, por lo que altísima es la dosis de responsabilidad que en ese sentido deberá
asumir su sucesor.
De ahí, vale la pena destacar las declaraciones concedidas por el
Presidente y el Vicepresidente a dos medios de comunicación.
Ante la pregunta : “Varios dirigentes han dicho que lo que se acordó en
Cuba es el fin de la guerra y no el comienzo de la paz. ¿Eso es así? A lo que Santos respondió a El Tiempo: “Lo
hemos dicho en muchas ocasiones: lo que se acordó en La Habana con
las Farc es la terminación del conflicto armado con esa organización. Se
trata del primer paso para la construcción de una paz estable y duradera en
la que debemos participar el gobierno, las Farc y toda la sociedad colombiana”.
Y Germán Vargas Lleras ante la pregunta de Semana, ¿Qué le pareció mal? ¿Hay algo que le preocupe de
los acuerdos? Expresó que ante el punto de la jurisdicción especial para
la paz, había razonables inquietudes en muchos sectores del país. Al
preguntársele en qué sentido, respondió que esa jurisdición tendrá
competencia no solo sobre los exmiembros de las Farc y los
integrantes de la fuerza pública, sino sobre aquellos civiles que directa
o indirectamente hayan tenido alguna participación en, por ejemplo, la
financiación de grupos armados ilegales.
Le parece a Vargas que ese sería un ámbito demasiado amplio que
se agregaría, además, al riesgo de los falsos testigos lo que genera
un escenario para preocuparse, según él.
Lo dicho por Santos es la realidad de lo logrado. Lo expresado por Vargas abre el camino de discrepancia sobre un tema de suma importancia en quien se perfila como el más seguro sucesor de Santos.
Al margen de ello, ¡bienvenidas todas las posturas! esa será la gran característica de este nuevo país en el que todos podremos opinar, disentir o confrontar con argumentos y con ideas.
Buen día para todos.
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