Desde los inicios del Siglo XXI Brasil, en la mayoría de los casos, ha estado gobernado por tendencia de izquierda. Los recientes resultados de la primera vuelta en las elecciones presidenciales favorecieron con un 46% a Jair Bolsonaro alejándolo de Fernando Haddad, quien recibió el respaldo del 29% de los sufragios, esto pareciera indicar la proximidad de un giro radical hacia la ultraderecha que representa Bolsonaro. Todo, claro, si en la segunda vuelta a realizarse el próximo 28 del mes que corre, se consolida esa diferencia.
¿Quién es Jair Bolsonaro? Militar de reserva de 63 años, defensor insigne del régimen militar de los años 60 y 70. En el año 1999 dijo que estaba a favor de la tortura para luego en el 2016 señalar que "el error de la dictadura fue torturar y no matar". Racista y misógino. A una contradictora que lo acusaba de justificar la violación le respondió "Usted no merecería ser violada porque es muy fea, no es de mi gusto". Y en otro momento cuando entró a debatir argumentos con un indígena que le arrojó un vaso en la cara, expresó: “Él debería ir afuera a comer pasto, así puede mantener sus orígenes".
Para ser más explícito en lo que es y representa este candidato de ultraderecha, bueno es saber, por ejemplo, que de las comunidades negras dice que "no hacen nada, solo sirven para procrear", y además asevera que ninguno de sus hijos se casaría con una pareja de piel negra "porque ellos están muy bien educados ".
Hoy las encuestas arrojan que posiblemente el 58% del electorado lo respaldará en la segunda vuelta lo que lo coloca como el casi seguro electo Presidente del más grande país Suramericano. La clase más pudiente de Brasil acompaña según esas encuestas a Bolsonaro. Pero ellos son una minoría, lo que lleva a pensar que es la clase media y popular la que estaría otorgándole el muy probable triunfo.
Y ello pareciera ser consecuencia del desengaño de un electorado que ve en el partido de los Trabajadores y en su líder Lula da Silva el foco de más alta corrupción a raíz de las permanentes denuncias y al carcelazo que hoy sufre el líder de la izquierda más connotado de Brasil. Son vistos como unos dirigentes que se dedicaron a robar en lugar de servirle al pueblo.
Y lo anterior lleva de manera directa a un crecimiento sostenido de Bolsonaro en las encuestas, más aún después de haber sufrido un atentado con puñal que lo ha mantenido hospitalizado.
De llegar Bolsonaro a la Presidencia no solo se generará un giro radical ideológico en el gobierno de su país sino además en las relaciones y alianzas políticas, económicas y sociales de Brasil a nivel regional y mundial.
Bolsonaro personifica una derecha extrema, mientras que Haddad simboliza el retorno de la izquierda al poder. ¿Qué opción tomará el electorado? Es una decisión que tiene al mundo sumido en la más profunda incertidumbre.
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